CÓmo Ser Felices

Dios está en cada uno de nosotros y, cuando se ama de verdad, es el amor de Dios el que nos alcanza, aunque se nos presente disfrazado de humana carnalidad. ¿Qué es lo profundo?, ¿descubrir que Dios existe, o saber que Dios nos abraza físicamente al abrigo de los cuerpos de todos los que nos aman y amamos? En mi juventud conocí a Dios en esencia, lo realicé en mi interior, pasaron muchos años hasta que pude empezar a encontrarlo en el corazón de los demás… Hoy sé, que no puedo evitar amar a todos los que conscientemente llevan a Dios en sus corazones y ellos tampoco, porque aunque anda en muchos cuerpos somos siempre uno en él. Mirando hacia atrás, comprendo ahora que no es posible la felicidad con todo aquello que es ajeno a nuestro ser. Y ahí estuvo siempre la razón de mis equivocaciones y sus frutos de debilidades. Cuando hay amor, incluso todo lo que parece alejarse, es la antesala de un mayor encuentro y la bienvenida a una mayor comprensión. Sin amor, el perdón es inaccesible, cuando nos llega todo se nos inunda e ilumina, todas las sombras huyen y caen deshechas, todos los obstáculos se rompen, todas las trabas ceden, todo lo malo se desata de nuestros corazones y se aleja para siempre.

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